lunes, octubre 11, 2010

Una pequeña danza del caos.

*Los hechos narrados se presentaron la mañana del miércoles 6 de octubre del presente año entre las 9:05am y las 9:25am

Despierto y veo que es ya un poco tarde, como siempre pero sé que tengo que llegar temprano al trabajo por cualquier cosa que pueda pasar con la modificación del software que hice la noche anterior. Me baño rápido y en lo que me estoy vistiendo suena mi celular. La adrenalina crece un poco porque casi no me llaman tan temprano, así que pienso que mi modificación está haciendo tronar el aplicativo bancario.

La llamada fue de mi nueva roomie temporal para que me fijara sobre una mancha de aceite de su carro o algo así, la verdad ya a estas alturas no recuerdo bien. Salgo con un poco de prisa para llegar cuanto antes y estar al pendiente por mis obligaciones profesionales. Mis cambios no pasan como normalmente lo hacen, me meto directamente a producción para modificar algunas cosas sin que se enteren. Si lo hago por el camino normal, me tardaría al menos un mes más para lidiar con toda la burocracia y el usuario es el principal afectado.

Normalmente tomo un camino en donde hay que ir despacio porque pasa cerca del centro del pueblo. Ahora no, como llevo un poco de prisa mejor me voy por la avenida que puede tener un flujo mejor. La distancia es muy relativa en cada lugar, en algún pueblo en provincia la distancia se mide en metros. En la Ciudad de México, la distancia se mide en horas, pero aquí yo la mido por la cantidad de idiotas por los que me voy a encontrar. Me dicen que acá nada queda tan lejos, pero por mi definición anterior creo que muchas cosas si me quedan lejísimos.

Veo que por fin en el carril de alta los carros van más rápido de lo habitual, a aproximadamente unos 90Km/h; eso es raro porque, a pesar de ser 3 carriles centrales, en los tres se maneja a lo mas a 70Km/h. Decido tomar el carril rápido. Pasamos por varios puentes y se me mete una camioneta que me impide ver más el frente, así que confío en que no habrá contratiempos (grave error).

El vistazo normal por el retrovisor veo que hay un vehículo blanco atrás. Pienso en cambiar de ese carril porque está cerca mi salida, decido hacerlo pasando ese puente. Al bajar del puente mis reflejos se disparan, la adrenalina sube y mi visión se enfoca a la camioneta de enfrente porque veo que frena bruscamente. Meto a fondo el freno y de tanta fuerza que aplico me pasa por mi mente la posibilidad de que se rompa el pedal. Me acerco rápidamente a la camioneta y creo que ya es inminente que la choque por detrás. Mi visión periférica registra el humo que sale de mis llantas y que alertan aún más al carro blanco detrás de mi, noto que de plano está moviéndose de un lado a otro para tratar de frenar y no impactarme.

Hago alto total y la camioneta también lo hace, espero el golpe por atrás pensando que el chevy blanco me va a impactar, veo que, al igual que yo, se alcanza a detener pero muy cerca de mi. Al pensar que la habíamos librado y estar viendo por el espejo retrovisor al chevy blanco detrás de mi, noto que repentinamente se oscurece la parte trasera del chevy moviendo a los tripulantes hacia delante, Inmediatamente siento el golpe de lleno que me hace perder la vista del espejo, siento que el cinturón de seguridad hace su chamba al no proyectarme hacia delante pero el zangoloteo lo siento muy poderoso en la parte baja de mi espalda.

La fuerza es tal que por mas que tengo el pié en el freno me impacta de lleno a la camioneta que tengo enfrente, veo que el golpe hace que la abolle y mi cofre se levante. Con un poco de coraje y una vez que me aseguro, de manera rápida que sigo vivo a pesar del sonido tan fuerte del golpe, escucho casi inmediatamente el rechinar de otras llantas y el ruido de otro choque, el cual me llega, por segunda ocasión un impacto de menor intensidad. Escucho varios rechinidos de llantas y un tercer impacto, esta vez no lo sentí. A estas alturas mi enojo se incrementaba porque no podía creer que estuvieran llegando los carros y seguir impactando, hice un comentario (no estoy seguro si fue en voz alta) preguntándome si había niebla qu yo no la veía o porqué chingados llegando y chocando con los demás. Ya esperaba ver algún carro volando como la escena de la película Matrix II que se hace en la autopista.

Finalmente ya no se escuchó los rechinidos pero sí un silencio, Terminé sentado un poco de lado derecho. Mi tobillo y muñeca izquierda siente un ligero adormecimiento, mi espalda baja es la que siento el dolor pero no tanto como para tomarlo muy en serio. Alcanzo a escuchar ya el motor del carro y lo apago poniendo el freno de mano. Me quedo unos segundos dentro y veo que el chavo de la camioneta de enfrente sale pero sin reclamarme nada, al parecer vió que yo había alcanzado a frenar y no tuve la culpa. Se dirigió al frente para ver el daño que pudo haberle causado al carro que él tenía enfrente. Yo trato de abrir la puerta y me cuesta un poco de trabajo, en ese momento sé que es el choque mas fuerte en el que he estado porque los anteriores no afectaba para nada la apertura de la puerta. Apliqué un poco de fuerza extra para abrirla y poder levantarme para seguir evaluando los posibles daños que tuviera mi cuerpo.

Veo que al chevy blanco está muy dañado, tiene cuatro ocupantes y los de atrás los veo algo graves porque no están bien sentados, están casi acostados y como si estuvieran dormidos. No creo que estén inconscientes porque el conductor y su copiloto no se ven tan angustiados, el copiloto es una mujer que veo que escurren unas lágrimas. Es la primera que baja y vá hacia donde estoy. Pregunto por su estado, me dice, riendo de nervios que están bien. Noto que yo también tengo una sonrisa de nervios. Le digo que se calme, que al parecer todo fue laminero y ahora esperar a hablar a los seguros.

Mientras hablo al seguro llega la policía para recogernos todas las licencias de conducir y hacer su trabajo de recabar información preliminar. Nos indican que nos salgamos de ahí para orillarnos a los carriles laterales. Al parecer no hubo heridos pero los responsables no admitieron su culpa (el que impactó al chevy ocasionó que éste impactara conmigo y yo a la camioneta). El chevy es pérdida total pero como los estúpidos no tienen seguro, pues no van a pagar un carro y la reparación mayor de otros dos. Toda la mañana perdida y lo que me espera de tiempo sin tener mi carro.

Dentro de toda esa danza del caos, creo que soy el único consciente de los detalles de los impactos, me impresionó todo lo que puedo recordar como si fuera en cámara lenta. Los demás no fue lo mismo, había quienes solo recuerdan un impacto y ya no supieron nada hasta que salieron del carro. En total fueron 12 los vehículos afectados formando un nuevo record para el estado de Querétaro. Creo que tiene mas valía a la estupidez porque fue sin lluvia y sin neblina.

Aún me llega un dolorcillo en la espalda baja pero se va a pasar. Salimos bien y solo queda la experiencia. Lo raro es que en todo lo que pasó, no me dio nada de miedo. Y la adrenalina liberada siento que fue menor a cuando hice mi salto bungy de ya hace varios años.

¿Acaso me estaré volviendo insensible?



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